Día inexplicable... Ambiente húmedo, sol apagándose, que rápido pasan las estaciones... Que rápido pasan las horas, los días, los meses, cuando eres feliz... Todo era muy rápido, y no quería eso para mí, yo quiero mirarme mientras los segundos se convierten en minutos y los minutos en horas, yo quiero ver un interminable atardecer, quiero ver como subo, como bajo, quiero ver como pienso, quiero verme actuar y ahora todos mis días son lentos, le saco probecho sí, pero no de cuerpo de mente, aunque se vuelvan melancólicos mis días grises, aunque caigan las hojas a la vez que mis lágrimas, aunque sea hoy que miro al mundo con ojos nuevos, no felices, ni de alegría, pero ojos llenos de azul esperanza que espera un nuevo rayo de sol, con el tiempo...
Pero por ahora que llueva, que truene, que nieve, seguiré aquí contemplando la dicha de un mundo con la mirada perdida...
jueves, 24 de septiembre de 2009
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sencillamente genial, de matricula sin el menor atisbo de duda.
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